Los operadores de red de Carrier en India están perdiendo alrededor de $ 350,000 ~ 24.5 millones de rupias de ingresos cada hora debido a los cortes de Internet consecutivos.
Varios estados han suspendido los servicios de Internet y mensajería a raíz de las protestas en todo el país contra la Ley de Enmienda de Ciudadanía.
La ley otorga la ciudadanía india a los miembros de las comunidades hindú, sij, budista, jainista, parsi y cristiana que han venido de Pakistán, Bangladesh y Afganistán antes del 31 de diciembre de 2014. Curiosamente, la ley excluye a los musulmanes.
Junto con el NRC [Registro Nacional de Ciudadanos], el acto pone en peligro a los musulmanes de la India al ponerlos en una posición difícil para demostrar su ciudadanía en los meses siguientes. Los documentos que podrían usarse para probar la ciudadanía aún no están claros.
Desde la promulgación de la ley, el país está presenciando enfrentamientos entre manifestantes y policías, que se han cobrado la vida de unas treinta personas. Para frenar las protestas, el partido de derecha BJP ha estado ordenando activamente a las telecomunicaciones que cierren Internet.
La Asociación de Operadores de Celulares de la India, que comprende varios operadores de telefonía móvil como Bharti Airtel, Vodafone Idea, Reliance Jio, dijo a Reuters: “El cierre de Internet no debería ser el primer curso de acción”.
“Hemos destacado el costo de estos cierres … creemos que el costo es cercano a 24.5 millones de rupias por una hora de cierre de Internet”, dijo el director general de COAI, Rajan Mathews.
Curiosamente, India tiene el récord mundial por el mayor número de apagones de Internet. Ha habido al menos 374 puntos de corte desde 2012, y más de 100 solo en 2019. El estado indio de Cachemira está presenciando un cierre de Internet durante más de 145 días, que es el más largo en una democracia.
Muchas asociaciones de derechos humanos y activistas de la libertad de expresión han condenado los recientes cierres de Internet en el país. Mientras tanto, China elogió las acciones del gobierno indio y lo calificó como “una elección razonable de países soberanos basada en intereses nacionales”.
